La sequía prolongada en Chile

Chile vive una de las sequías más prolongadas de su historia, y aunque las lluvias de 2024 ofrecieron un pequeño alivio, los expertos coinciden en que la crisis hídrica sigue en curso. Pero en medio de este escenario preocupante, la ciencia chilena

está desarrollando soluciones tan creativas como efectivas. Una de ellas es el mapa del agua de la niebla, un proyecto que podría cambiar la forma en que accedemos al agua en zonas áridas del país.

¿Qué es el mapa del agua de niebla?

Este mapa interactivo fue desarrollado por un equipo de científicos chilenos con el objetivo de identificar las zonas más aptas para recolectar agua de la niebla. Utilizando datos climáticos, topográficos y meteorológicos, el sistema permite visualizar con alta precisión dónde es viable instalar tecnologías como los atrapanieblas: estructuras que capturan pequeñas gotas de agua presentes en la niebla y las convierten en agua líquida.

Chile cuenta con vastas zonas costeras del norte y centro-norte que, si bien sufren escasez hídrica, están expuestas constantemente a bancos de niebla. Comunas como Alto Hospicio, Chañaral, Mejillones y Paposo podrían beneficiarse enormemente de esta tecnología.

En algunos sectores, los atrapanieblas ya logran recolectar hasta 10 litros de agua por metro cuadrado al día, lo que podría abastecer a comunidades rurales, mejorar cultivos o incluso restaurar ecosistemas locales.

Tecnología ancestral

La recolección de agua de la niebla no es nueva: comunidades indígenas del norte de África y Sudamérica ya utilizaban métodos similares. Pero el valor de este nuevo mapa radica en que permite escalar esta tecnología con precisión científica, optimizando recursos y asegurando resultados efectivos.

El proyecto se apoya en modelos de inteligencia artificial, datos satelitales y una interfaz amigable que permite a tomadores de decisiones, municipios y ONGs identificar oportunidades concretas de intervención.

Una solución sostenible y replicable

En tiempos donde se habla mucho de crisis climática y adaptación, este mapa representa una herramienta poderosa. No solo promueve una alternativa ecológica, de bajo costo y sin impacto ambiental negativo, sino que además puede ser replicada en otros países que enfrentan desafíos similares.

La innovación tecnológica no siempre tiene que ser futurista. A veces, las respuestas más efectivas vienen de observar la naturaleza y aplicar ciencia local con inteligencia. El mapa del agua de la niebla es un ejemplo claro de cómo Chile puede enfrentar la crisis hídrica con creatividad, sustentabilidad y colaboración.

LANZAMIENTO DEL MAPA DEL AGUA DE NIEBLA : 2 DE JUNIO , SANTIAGO